lunes, 17 de septiembre de 2012

Tiempo de viajes



VIAJAR A OTROS PAISES NOS CONVIERTE EN EXTRANJEROS, 
en personas que necesitan hacerse entender y según la calidad de conocimientos del idioma requerido, al llegar al hotel en nuestra soledad, tendremos la sensación de vacío, de saber que un día más no hemos podido conectar emocionalmente, profundamente con nadie. Nadie nos ha entendido...nadie nos ha conocido...


Ello nos produce desasosiego, .....soledad. 
Pero en el viaje, esto es fortuito, casi buscado, sin embargo en la vida cotidiana, nos puede ocurrir esa misma sensación, tengamos o no alguien con quien compartir  nuestra vida.
Fernando Pessoa, describió como nadie esa sensación "libro del desasosiego"y la filosofía existencialista a través de su narrativa nos describió personajes, cuya personalidad les convertía en extranjeros en cualquier lugar. De hecho, aquí se reconvierte en espejo ese sentimiento, ya que el vacío lo siente la persona que comparte la vida con "el extranjero". 

Albert Camús en su novela describe en las frases dichas por el personaje, su gran dificultad de hacerse entender y a la vez entender el mundo que le rodea. En contraposición su obra "El primer hombre", autobiográfica nos deja ver un hombre lleno de ilusiones y sentimientos, con su vida dirigida hacía motivaciones sublimadas.

En mi práctica psicológica he realizado tratamiento a diversos "extranjeros", personas difíciles de hacerse "entender" y no por sus carencias intelectuales, ya que normalmente son personas muy eruditas intelectualmente o profesionalmente. De hecho la mayoría de las veces llegan a mi consulta aconsejados por sus propias parejas o gente muy cercana que ya no saben que hacer para que entiendan sus sentimientos. 

Estas experiencias profesionales, que a nivel de definición de trastorno no englobarían los criterios de ningún trastorno de la personalidad, son explicados perfectamente por los existencialistas y ello me llevó a realizar los estudios de doctorado sobre este tipo de psicoterapias.

La literatura, la filosofía nos explica muchas cosas y movida por este interés realicé una jornada dedicada a un tipo de "estres" que producía este tipo de conductas "el cansancio de la vida cotidiana", personas que no llegaban a tener una depresión, pero su cansancio cotidiano les llevaba a ser extranjeros de sí mismos.

Rafael Argullol en su libro de conversaciones sobre "el cansancio de Occidente", me pareció digno conferenciante sobre esta temática, compartiendo mesa con psiquiatras. El contraste de la filosofía con la psiquiatría nos explica y explicó muchas emociones humanas. En la Academia de ciencias Médicas, hace ya más de una década se consiguió un grado sumo de interés alargándose el coloquio más de lo previsto debido al gran interés.

En el momento social y humano que vivimos, existen diversas formas de afrontar algunos mediante el estrés, que los hace diagnosticables y sentirse incluso "entendidos medicamente", pero otros se rinden y forman este estilo de conducta que acaba formando ese estilo de personalidad cerrada, distante ....de cansancio de la vida cotidiana. 

Rafael Argullol, en su obra realiza también - como Camús- reflejo  en espejo, mostrando  lo contrario del "cansancio"  en su libro "el cazador de instantes", o "cuaderno de travesía" el negativo y el positivo entre ambos.   Mezclando poesía, pensamiento y narrativa va a la búsqueda -como el mismo cita- de la profundidad de la vida.

Aprendamos de la filosofía, aprendamos de la literatura, aprendamos de la vida, aprendamos de las personas y de los viajes grandes y pequeños, de las culturas y de las tradiciones.

Por ello, ES TIEMPO DE VIAJES, de viajes transversales, de profundizar en la vida, dejemos  de ser extranjeros y seamos viajeros, para conocernos a nosotros mismos profundamente y a la vez poder conocer y dejarnos conocer mejor a los demás.

ES TIEMPO DE VIAJES.......HOY.



©gloria giménez texto y fotografía



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